Tumores mamarios en perras y gatas
Aunque estos tumores son mucho más frecuentes en hembras, no quedan descartados de padecerlos los machos. Por especies, los tumores en perras tienen un 50% de ser malignos, mientras que en el caso de las gatas este porcentaje sube hasta el 85%. El pronóstico, por tanto, varía de una a otra especie.
Cuales son las causas de los tumores mamarios en nuestras mascotas
La causa más frecuente de la aparición de este tipo de tumores son las hormonas. Las hembras no esterilizadas tienen más probabilidades de desarrollarlos que las que no lo están. Los estudios muestran que cuanto más tarde se lleve a cabo la esterilización, más probable es que aparezcan. Lo más aconsejable para evitar estos tumores es esterilizar antes de que aparezca el primer celo.
Los animales que en algún momento se hayan sometido a un tratamiento hormonal, normalmente para la interrupción del celo, también tienen mayor probabilidad de contraerlos.
Otros factores como el sobrepeso o la mala alimentación también pueden influir en la aparición de esta patología.
Algunos de los síntomas que pueden alertarnos de su aparición es la presencia de secreción mamaría, con las mamas inflamada y calientes. La aparición repentina de bultitos en el abdomen que antes no estaban es otro síntoma habitual. Es recomendable revisar las mamas periódicamente para detectar estos síntomas. Si encontramos un nódulo que haya crecido de forma rápida, que no esté bien delimitado, caliente y ulcerado en muchas ocasiones, es motivo de una visita a cualquiera de nuestros centros.
También puede aparecer pérdida de peso, apatía y debilidad del animal.
Diagnóstico de los tumores mamarios en perras y gatas
En primer lugar una exploración física general y de los bultos y de los linfonodos cercanos al nódulo. Después es necesario hacer una serie de pruebas hemográficas y bioquímicas para determinar el estado de salud general del animal y radiografías de tórax para descartar posibles metástasis. En algunos casos es recomendable realizar ecografía para establecer un estudio más detallado del estado de los ganglios y las posibles metástasis.
Tratamiento frente a tumores mamarios
Lo más recomendable es retirar todo el tejido mamario afectado. El tipo de intervención vendrá determinado por la ubicación, tamaño y posibles ulceraciones de los nódulos.
Tras la operación hay que hacer una biopsia del tejido retirado para diagnosticar de que tipo de células conforman dicho tumor.
Cuidados posoperatorios
Es de vital importancia que durante la primera semana el animal guarde reposo, evitando carreras y saltos y lleve el collar isabelino. Esto ayudará a su mejor cicatrización. Normalmente necesitan medicación profiláctica con antibióticos, para evitar infecciones, curas y medicación antiinflamatoria y analgésica.
El pronóstico tras la retirada radical del tejido mamario suele ser bueno para las perras. En el caso de las gatas la evolución es más incierta, ya que suelen ser tumores más agresivos y generalmente dependerá del resultado de la biopsia. Lo mejor, que en cuanto sea detectado, aunque sea muy pequeño, eliminarlo cuanto antes.